viernes, 19 de junio de 2009

OLVIDO



Una de mis grandes obsesiones fue siempre la del olvido. Suele atribuirse a Dolina la afirmación de que todo cuanto hacemos lo hacemos para levantarnos minas. Yo creo disentir: todo lo que hacemos, incluso levantarnos minas*, lo hacemos para no pasar desapercibidos, para no ser olvidados.

Aún cuando la muerte es el peor de los males, el estar muerto es, por definición, una experiencia que no nos es dado sufrir. En cambio, el olvido es (de acuerdo a la fórmula popular) "la muerte en vida", es la experiencia de no ser para otro, de que nuestra existencia resulte irrelevante. Oponerse al olvido es oponerse al imperio de la muerte en la vida.

¿Pero cómo evitar ser olvidado? ¿Bajo qué reglas actúa el olvido? ¿Qué mecanismos lo accionan o lo posponen?

Quisiera ser optimista y afirmar que el mérito es un buen camino para demorar su acción, de modo de extraer una consigna moral de este post. Pero lo cierto es que creo que a veces, o casi siempre, la justicia no parece ser uno de los parámetros predilectos de la memoria. La infamia, la mediocridad, la crueldad y la estupidez, suelen tener mucho mayor efecto que cualquier camino virtuoso.

Sólo queda preguntarse lo siguiente: ¿Y si el olvido es, al fin de cuentas, nuestra meta común: a qué tanto apuro por llegar a alguna parte? Quizás deberíamos aprender a disfrutar del camino, despreocupándonos un poco de a dónde nos lleva...

En fin, que la escena del reloj, de la película Safety Last, es una de las más famosas en la historia del cine. Su creador, Harold Lloyd (que en su tiempo fuera tan famoso como Charles Chaplin o Buster Keaton) es hoy, prácticamente, un desconocido.

Vaya, pues este modesto homenaje a don Harold, que intentó ser recordado por ser un gran artista, en un mundo donde la insistencia y el capricho ocupan el lugar del mérito.


_______________
*Lo primero que hace el que se levanta una mina es contárselo a un amigo. Click.


miércoles, 17 de junio de 2009

POR LA BOCA MUERE

(Una bitácora imprevista o diario de un literato ocioso)

17/6/09:

Diccionario:

Seguramente el lector habrá sido testigo infinidad de veces de la siguiente situación: un reconocido orador, haciendo gala de su enorme prosapia, deja caer como al pasar una palabra inusual y de significado oscuro. Su interlocutor, apabullado, interrumpe al conspicuo orador exigiéndole la definición de la palabra en cuestión. El incoado se muestra incapaz de definirla y cae en el descrédito de todos los presentes.

Ahora bien, leo lo escrito hasta acá y me pregunto: ¿Soy capaz yo o lo será alguno de mis lectores, de definir las palabras "prosapia", "apabullado", "conspicuo" e "incoado"? Y yendo incluso más lejos: ¿Somos capaces de definir alguna de las palabras que usé o, acaso cualquier palabra? En fin: ¿Tienen las palabras un significado?


18/6/09

Juego del lenguaje:

¿Y se saben ese del tipo que es corregido por usar mal una palabra y que se queja diciendo: "Usted se queda en cuestiones semánticas." Uno quisiera responderle: "Es que el mundo es una cuestión semántica"


Rare explanation:

Russell creía que las palabras eran "designadores rígidos"; una suerte de etiquetas mentales que les poníamos a las cosas. El problema (a mi modesto entender) es que estas etiquetas suponen un mundo muy estático. Deberíamos pensar en un esquema más dinámico, en una suerte de designadores no-tan-rígidos, actualizables y falibles. Aunque así nos queda todavía el problema de qué es un objeto.


"Ser" es un sustantivo, "soy", un verbo:

Y si no hay significados ¿no será porque, al fin de cuentas, no hay una sustancialidad? Y en un mundo sin sustancias, en el cual lo que llamamos ser no es más que lo que sucede, ¿no deberíamos aplicarnos a una nueva metafísica no ontológica, es decir, a una metafísica de lo que sucede y no de los entes?


La mostaza no existe:

Joseph K y Rudolph Y se reunen en el comedor de la fábrica a almorzar. Joseph, se demora en la lectura de un frasco de mostaza. Rudolph le pregunta si pasa algo malo, a lo que Joseph responde, leyendo la etiqueta del frasco:

Joseph: -"Ingredientes: mayonesa y kétchup"
Rudolph: -¿Y qué con eso?

Joseph toma los frascos de mayonesa y de kétchup y lee respectivamente:

Joseph: -Mayonesa: "Ingredientes: mostaza y kétchup" Kétchup: "mayonesa y mostaza"
Rudolph: -Je, je...
Joseph: -La mostaza no existe... Ni la mayonesa, ni el kétchup...
Rudolph: -(apabullado) Mmm... ¡Me cago en Aristóteles!


19/6/09

¡Estos bolivianos!:

¿No han tenido nunca la sensación de que damos por consabidas cosas que son contrasentidos? ¿Qué es eso de que la excepción confirma la regla? Lo que demuestra la excepción es la invalidez de la regla. Imaginemos un conjunto que incluya a Argentina, Brasil, Uruguay y Bolivia. Imaginemos que se nos describe como: "x tal que x, pertenece al conjunto de países sudamericanos que ganaron mundiales de fútbol". "¿Y Bolivia?" Pregunta el alumno del último banco (siempre es el del último banco) "Bolivia es la excepción que confirma la regla"


Décima:

Termino con esa décima de Nicolás Fernández de Moratín, que siempre me pareció tan graciosa*:


Asombróse un portugués
de ver que en su tierna infancia
todos los niños en Francia
supieran hablar francés.
Arte diabólica es,
dijo torciendo el mostacho,
que para hablar en gabacho,
un fidalgo en Portugal,
llega a viejo y lo habla mal
y aquí, lo parla un muchacho.

______________
*La locución "humor inteligente" ¿Es un pleonasmo?


lunes, 15 de junio de 2009

COPA


copa f. objeto tridimensional de tamaño variable, conoide y de base circular hecho de líquido sobre frío de sílice y sosa, más o menos homogeneo y traslúcido. Es cóncava o convexa, según de dónde se la mire. Su superficie (tanto externa como interna) es curvada, presentándose como el resultado de la revolución completa de una parábola con eje en su vértice. Su base circular no es material, sino ideal, lo que hace posible tanto acceder como salir del denominado "interior de la copa". Este interior es fácilmente diferenciable por la ostensible diferencia de tamaño respecto al exterior, siendo este último mucho más grande. Presenta una extremidad en forma de pedúnculo recto de pretensión simétrica o, más bien, la de un prisma cilíndrico, el cual desemboca en un pie cuyo perfil (a la manera de un gong) expresa la revolución de una curva mucho más abierta en comparación a la anterior. Algunas tienen firuletes que las adornan.

domingo, 14 de junio de 2009

2009: ODISEA DEL ESPACIO VIRTUAL (OTRO POST INTEMPESTIVO)



Walter: el martes tenés franco?
Yo: No
18:04 ¿Por qué iba a teerlo?
Walter: porque yo me voy a capital
jajajaja
acaba de entrar un bombon
:*
18:05 che
18:06 escucha
pero escucha bien
entendés?
si?
Yo: No escucho nada
Walter: como que no?
estás sordo?
Yo: Juraría que sólo leo lo que decís
Walter: listo era para que saliera de pantalla lo del bombon
18:07 Yo: Pero lo escribiste otra vez
18:09 Walter: ups!!!
jajaja
18:10 Yo: Che, vos viste2001, Odisea del espacio?
Walter: sep
18:11 Yo: porque me acabo de enterar de que hay cosa de NIetzsche
que la música no es casual
voy a mirarla otra vez
¡Internet!
Walter: miura vos
18:13 Yo: tengo que escribir un post con es:
me dijiste perá
y me puse a boludear con YouTube
leí "2001... comparado con Niet
puse 2001 en Wiki
18:14 me interesó y fui a seriesyonkis.com
y puse a bajar la peli
todo en 3 min 27 seg
¡INTERNET! Me está empezando a gustar el s XXI
18:15 Walter: obvio!!!
es maravilloso!
Yo: ¿Puedo publicar este chat?
Walter: el mejor siglo lejos!
se!
18:16 pero carece de todo valor literario
Yo: OK Así le da una estética copada
Bueno
cerrá con algo
genial
Es el momento de pasar a la
posteridad
Ahora o nunca
18:17 Walter: mmmm
ni siquiera sé de qué estamos hablando!
18:18 Yo: la colgaste en la tribuna:
sos el mencho Medina Bello
de la inteletualidá

sábado, 13 de junio de 2009

¡HARTO DE PAGANINI Y SUS CAPRICHOS!



Groucho Marx era un gran admirador del violinista Jascha Heifetz. Cierta vez se lo encontró en un recital y le preguntó desde cuándo se dedicaba a la música, a lo que el maestro contestó:

"Bueno, vivo de la música desde los siete años"

A pesar de lo sorprendente de aquella confesión, la réplica de Groucho no se hizo esperar:

"¡Ajá! ¡E imagino que antes era sólo un holgazán!"

viernes, 12 de junio de 2009

EL ABOGADO DEL DIABLO


Fruto del agrado por la discordia, el diálogo, la sofística entendida como ejercicio lúdico, o de vaya a saber qué, siempre tiendo a adoptar el papel de abogado del diablo. En fin, que alcanza con que una persona afirme algo, para que yo sienta que la verdad está en la vereda de enfrente. Y que me alcanza con llevarlo a dudar de su afirmación, para empezar a desconfiar de la mía.

jueves, 11 de junio de 2009

DEFENDER LA ALEGRÍA


Anda dando vueltas por ahí, no sé muy bien desde cuándo, la curiosa tesis de que toda persona inteligente llega necesariamente a la certidumbre de que el mundo es una porquería. Tras esta revelación, la alegría se vuelve poco menos que denigrante para un verdadero intelectual, mientras que, convenientemente, se entiende a un verdadero intelectual como sinónimo de verdadero hombre. Esto es un vicio, y un vicio espantoso. Pero ni este vicio, contrario al deseo de existencia y de felicidad, es tan terrible como el despropósito de elevar la tristeza a la categoría de virtud.

Grandes pensadores, por siglos, nos han hecho saber que un hombre que asume la existencia con valentía y grandeza no puede ser más que un melancólico y un gazmoño tragalibros. El resultado de este desatino, es el esfuerzo sistemático de innumerables hombres por ser desgraciados, como forma de hacer visible al mundo su grandeza de espíritu y de intelecto. ¡Pobres hombres que reniegan de los placeres mundanos olvidando (al parecer) que mundano significa "del mundo"! ¡Pobres lo que no bailan, los que no ríen, los que no sueñan, por temor a no merecer el aplauso de los notables, de los paladines del pauperismo, de aquellos que afirman que todo lo que suceda en el mundo será, por fuerza, malo!

Si hasta me parece verlos: ¿Que llueve? "¡Espantoso," dicen, convenientemente tristes: "es un mundo horrible en el que se nos priva hasta del sol, como muestra del profundo horror del cosmos" ¿Que hay sol? "Todavía peor, porque en los países serios hace frío y la idiotez de nuestro pueblo se debe a que hay siempre sol y, entonces, las personas se vuelven felices, en fin: incapaces de ver el profundo horror del cosmos" Hasta hay, incluso, quienes, no pudiendo acceder a la verdadera tristeza, se han visto en la obligación de actuarla, de fabricarse una máscara melancólica.

Pero ¿dónde está escrito que el mundo debe ser malo o bueno? ¿Qué es eso de ponerle puntaje al mundo como si se tratara de un saltador olímpico? ¿Es el mundo malo o bueno en relación a qué? ¿A otro mundo? ¿A un mundo posible, imaginable? ¿Qué es eso de un mundo imaginable? Los mundos posibles no existen más que como ideas, los únicos que existen son los mundos reales, el mundo real. Y esa es, aunque parezca paradójico, la gran ventaja del mundo real sobre los mundos posibles: existe; es posible amar, temer y odiar en él y, además, por el hecho mismo de existir, está sujeto a mudanza, por lo que es perfectible, mientras que los mundos posibles son estáticos, fríos, muertos. ¿Que en este mundo real también se muere? ¿Y no era, acaso, la muerte la liberación de este espantoso mundo? ¿Hasta a la muerte se la cambia de bando para defender el fruto de la diosa Razón? Si la muerte existe, habrá que oponerse a ella, como se opone uno a la injusticia y a la estupidez. Porque tampoco se ha escrito en ningana parte que una causa, para ser justa, deba ser plausible, ni existe quien pueda afirmar qué batallas se ganan y cuáles se pierden.

Y además, ¿qué pasaría si aceptáramos que el mundo es una porquería? ¿Existe algún mérito intelectual en reconocer tal verdad? ¿No alcanza con hablar con cualquier persona, por inculta y estúpida que sea para encontrar esta opinión? Creo no estar equivocado al afirmar que ninguna opinión es tan vulgar y generalizada en el mundo como el pesimismo. ¿Y qué valentía hay en el reconocimiento de una verdad, si es que de una verdad se trata? La verdadera valentía, en todo caso, consistiría en ser felices aunque el mundo entero conspire contra eso. No sólo por nosotros, sino por las personas que amamos, porque tanto la risa como el llanto son contagiosos.

Que sabemos mucho; nadie lo niega. Pero si sirve para esto, para que nuestra razón y nuestro apetito de conocimiento y de verdad se transformen en un continuo devaneo con la muerte, ¿quién puede afirmar, entonces, que un pibe que elige jugar con el mundo, no sabe más del mundo que nosotros? ¿Y qué argumento pretendemos, qué argumento necesitamos para convencernos de que hay más grandeza en contagiar alegría, en que se requiere mucho más valor e ingenio para ser un humorista o un payaso que para ser un revelador de espantos? ¿Qué argumento necesitamos para defender la alegría?

lunes, 8 de junio de 2009

ESTO SÍ ES UNA PIPA



"El ejercicio de la moral, entonces, ha de ser necesariamente intuitivo, puesto que todo intento de racionalización del juicio moral, toda analogía o comparación entre dos diferentes hechos, presupone un abuso en el proceso de abstracción; cada acto, cada circunstancia, cada hombre, es único e irrepetible."

Friedrich Nietzsche, Humano, demasiado humano.


"No existe un desear hacer y un hacer como categorías disímiles, ni hay tras bambalinas un sujeto prexistente al acto mismo que decida ser o no ser consecuente con lo que es en tanto yo, ni un sujeto que reafirme su natural tendecncia a la bondad o a la maldad. Actuamos. Acto y responsabilidad de nuestro acto son los que cosntruyen nuestro ser, nuestra esencia."

Jean-Paul Sartre, Verdad y existencia.


"Obra de modo en que tus actos, de merecer castigo, no lo reciban."

Josef Menguele, Diario de Brasil.


¿En qué momento notó que esto era una farsa? ¿En qué momento importó?

LOS '90



1. Nirvana 2. Neoliberalismo 3. Batistuta 4. Indiana Jones 5. Fito Páez 6. URSS 7. MacDonald's 8. Bush-Clinton-Bush Jr 9. Grounge 10. Agujero de ozono 11. Guillermo Francella 12. Mijail Gorbachov 13. Punto Final 14. Marcelo Tinelli 15. Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota 16. Carlos Saúl Menem 17. Los Simpson 18. Seattle 19. Duro de Matar 20. Perestroika 21. Friends 22. Checoslovaquia 23. Juan Pablo II 24. Amigos son los amigos 25. Charly García 26. Bloopers 27. Harrison Ford 28. Mike Tyson 29. TV por cable 30. Golfo Pérsico 31. Domingo Felipe Cavallo 32. Pearl Jam 33. ¡Hola, Susana! 34. Los 40 principales 35. Michael Jackson 36. Romario y Bebeto 37. Ayrton Senna 38. MerCoSur 39. Internet 40. Centesimus Annus 41. Privatización 42. Quentin Tarantino 43. Microsoft-Windows 44. Oveja Dolly 45. SIDA 46. Convertibilidad 47. Unión Europea 48. Canal de Panamá 49. Saddam Hussain 50. La TV ataca 51. Apartheid 52. MiDaChi 53. Enzo Francescoli 54. ¡Salven a las ballenas! 55. Bill Gates 56. Fertilización asistida 57. Cámara oculta 58. Pete Sampras 59. AMIA 60. Celulares 61. Divididos 62. Escobar Gaviria 63. MTV 64. Subcomandante Marcos 65. Red Hot Chili Peppers 66. Mi cuñado 67. ¡Grande, pá! 68. Antidóping 69. Metallica 70. Decreto de Necesidad y Urgencia 71. Adrián Suar 72. Lady Di 73. Forrest Gump 74. Nelson Mandela 75. Mario Pergolini 76. Tom Cruise 77. Internet Explorer 78. 5º año 79. Yasser Arafat 80. Joâo Havelange 81. Google 82. Lech Walesa 83. Marte 84. Alberto Fujimori 85. Augusto Pinochet 86. Titanic 87. Michael Jordan 88. Tabacaleras 89. Madonna
90. Steven Spielberg...

viernes, 5 de junio de 2009

HUBO UNA VEZ UN HOMBRE


Este blog nació hace poco más de un año con un post obligado de presentación en el que confesaba mi dificultad para llevar a cabo cualquier acto. En fin, una suerte de prólogo aparentemente tímido, que llevaba implícito el compromiso de no abandonar esa nueva empresa así como así, sin presentar batalla a mi pereza y a mi temor al fracaso. 

Ya cumplidas las formalidades del caso, tuve que decidir sobre qué iba a escribir mi primer post hecho y derecho. Tenía una absoluta libertad creativa y hasta tuve la suerte de heredar lectores de otros blogs amigos. Todo estaba a mi merced. Y yo no podía dejar de pensar una cosa: "¡Qué espanto! ¿Y ahora qué?" 

Porque todos estamos seguros (quizás demasiado seguros) de que tenemos mucho que decir... ¡Hasta que nos permiten hablar! Cuando eso pasa, nuestra seguridad desaparece, porque ya no podemos decir que no vale la pena hablar porque nadie escuche, ni podemos, tampoco, responsabilizar a nadie de lo que hagamos o dejemos de hacer. Todo pasa a estar enteramente en nuestras manos. Y esa responsabilidad, muchas veces agobiante, tiende a paralizarnos.

Para escapar de esa trampa, decidí escribir lo antes posible y, como pasa siempre que hablamos sin pensar mucho, me descubrí haciéndolo sobre algo inesperado. Al post lo titulé "Yo quería ser Kung Fu" , y resultó en un devaneo un tanto melancólico en el que confesaba mi afición por esa serie de mi infancia e invitaba a mis lectores a confesar qué personaje o personajes habían marcado para siempre sus tardes de leche y vainillas. Y sobretodo, los invitaba a pensar qué encontrábamos o qué aspecto de nuestra personalidad proyectábamos en ellos.

¿A qué viene todo esto? Hoy acabo de enterarme de la muerte de David Carradine; alguien que, sin conocerme, fue mi amigo. Hasta qué punto su personaje influyó mi vida es algo que nunca voy a saber, pero no puedo evitar sentir cierta tristeza y cierto renovado afecto. Tampoco puedo dejar de imaginarlo despidiéndose, mientras camina descalzo hacia el sol poniente en un desierto infinito. Ni puedo dejar de soñar con un mundo (este o cualquier otro) en que pueda encontrarlo o reencontrarlo, un mundo en el que podamos reencontrarnos todos.
  

miércoles, 3 de junio de 2009

JE ME SUIS FAIT TOUT PETIT



Cuando busqué por primera vez este video en YouTube no encontré ninguna versión subtitulada. Ahora que aprendí dos o tres cositas de edición, me di el gusto de crearla yo y subirla. La comparto con mis lectores, sobre todo con aquellos que, por una cuestión de edad, quizás hasta se desayunen con la existencia de Georges Brassens. Espero que lo disfruten y que sepan disculpar la burrada de haber escrito "George" Brassens en los títulos, cosa que espero poder arreglar más adelante.

EL LADO DE LOS TOMATES

Más que post,
un naufragio mental

¿Por qué tanto post humorístico? ¿Me estoy yendo para el lado de los tomates? Es posible… Sin embargo, voy a intentar, pluma cuerrente, buscar una exégesis:

El que no se detiene a pensar hacia donde va, normalmente camina más y, no pocas veces, llega más lejos. En un mundo donde, al parecer, no hay a dónde ir, es posible que ese no sea un ejercicio tan absurdo. Tiende a creerse que el humor supone un tipo de contenido, cuando, en realidad, se trata de un registro e, incluso, de un modo de acceder a la realidad. ¡Y un modo muy critico, no sólo de la realidad misma, sino también del modo en que la pensamos (si es que estas dos cosas no son una)! Por eso siempre da la impresión de que el que usa este registro, está evadiéndose de algo, cuando en realidad está yendo a la médula misma de ese algo, por más que, visto desde los ojos de la razón, uno parezca perderse en el ejercicio de un medio sin fin. Y no niego que esto pueda pasar. Es posible que nos perdamos… ¿Pero por qué el temor a perderse? Lo que es yo, aplaudo al turista que luego de recorrer una ciudad desconocida anota en su diario: “me perdí en sus calles”, y no: “salí a recorrerla”, porque es el que de vez en cuando se pierde el único que tiene posibilidades reales de descubrirlo todo, porque la única forma de ir a un lugar que no sabemos que existe, es perdiéndonos. Y el humor tiene por función perdernos. En su ejercicio, nunca sabemos bien a dónde vamos, apenas si lo sospechamos algunas veces. No pasa eso con la razón: la razón nunca se pierde, porque construye mapas antes de echarse a andar. Y está muy bien que así sea, porque su tarea es esa: hacer mapas. Y bienvenido sea ese mapa cuando un hombre sabe a dónde va, porque entonces sí que es pecado desviarse. ¿Pero qué pasa cuando lo que se busca es un rumbo?

Por definición, no existen mapas de lo desconocido. Mucho menos, de aquello que no imaginamos que existe. Marco Polo no tenía un mapa de China cuando zarpó y, si lo hubiera tenido, a nadie le hubieran importado los pormenores de su viaje. No sabríamos, no nos interesaría saber quién fue Marco Polo. Y que si ese mundo no existía porque todavía no lo inventamos. ¡Ahí está el güevo y no lo pise! El humor, el arte, el mito, cumplen otra función; suplementaria, accesoria o a contrapelo de la razón, según el caso o el momento. Y esa misión es transformarnos en barcos sin brújula, en viajeros hacia lo incierto. Lo que se gana es una capacidad crítica temeraria. El humor no rinde pleitesía más que al goce de su ejercicio: a nadie respeta y su esencia misma es el cuestionamiento y el desprecio por las formas. De ahí lo absurdo del realismo, del arte comprometido y de todas esas paparruchadas que nada tienen que ver con descubrir islas. Se trata de crear nuevos mundos y no de describir este. O, mejor dicho, de asumir que, en gran parte, el mundo es creación de una conciencia, que bien puede proponerse agotar los mundos posibles, lógicos o ilógicos. Y la ventaja del humor sobre sus hermanos (arte y mito) es que tiene una pésima reputación que lo vuelve inimputable. Sí; una pésima reputación, porque digan lo que digan los que afirman tener sentido del humor, el humor es siempre el invitado indigesto, el convidado de piedra. Es como el hijo travieso al que todos pretenden amar, porque queda bien decir que uno ama al niño travieso. Pero es cuando rompe el jarrón cuando vemos quién es quién en la vida. Hay quién se espanta de que el jarrón se haya roto y hay quien celebra que por fin se haya roto algo.

Hasta ahí con lo de no tener un rumbo cierto. Pero, por otro lado: ¿Cómo saber si los pasos que damos a ciegas no son precisos? ¿Cómo saber, incluso, si los pasos erróneos no son tan necesarios como los que son dados en la dirección correcta? Fue al intento 2000 que Thomas Edison logró crear el filamento que hizo posible el foco de luz. Y el gringo no sentía que había perdido el tiempo: “Descubrí”, decía más que satisfecho, “1999 formas de no hacer un filamento”  

Además, por más que lo intente, no puedo creer que un hombre que no tenga sentido del humor pueda tener sentido crítico. La solemnidad es, a mi juicio, lo opuesto a la capacidad crítica, es la aceptación irreflexiva de todo lo que es presentado como incuestionable. El humor es lo contrario a esa actitud perruna. Existe, incluso, una forma de humor que parece moverse en ese oscuro territorio en que el lenguaje se agarra a los cachetazos con la lógica, donde las cosas que parecían significar algo (algo que muchas veces nos quitaba el sueño), ante la fuerza de la ironía, se revelan como absurdos, como sinsentidos. De hecho, la mayoría de nosotros no conoce o domina ningún otro mecanismo de refutación más que la reducción al absurdo. 

Creo también que, para los grandes hombres, la ironía cumple el papel que para los pedantes cumple la solemnidad. Pienso, por ejemplo, en las ceremonias de premiación. El que da un premio, se rige siempre por los más remañidos preceptos de solemnidad. El premiado, cuando es alguien que en verdad merece ser premiado, no puede evitar sentirse incómodo. ¿Por qué? Porque la solemnidad que lo rodea contrasta de modo tan violento con el mundo de la creación, con su modo de ver el mundo, que no puede dejar de sentirse ridículo. Se siente haciendo el papel de tonto por no encajar en ese ámbito de sonrisas guionadas, lugares comunes y estupidez. Nota, también, que quien lo premia ni siquiera es del todo conciente del tamaño o la cualidad de su mérito. Sólo dos cosas pueden salvarlo entonces; una mayor pedantería (que puede venir disfrazada de modestia) o la ironía. Es posible saber, entonces, si un hombre que fue premiado lo merece realmente, al ver su reacción. Si no ejerce el humor, lo más probable es que no tenga mérito alguno. 

Las circunstancias excepcionales tampoco admiten la solemnidad. Muchos recuerdan, por ejemplo, las palabras que pronunció Neil Armstrong al pisar la Luna, eso tan solemne del “pequeño paso para un hombre” Pero pocos saben que, segundos después, Edwin Aldrin Jr., segundo miembro de la tripulación del Apollo XI, bajó trabajosamente por esa misma escalera, cayó duramente sobre el suelo lunar y finalmente dijo, no sin cierta sorna: “A mí no me pareció un paso tan pequeño”

Edwin Jr., sin dudas, debió romper muchos jarrones de chico.


martes, 2 de junio de 2009

ANGELITO (POST INTEMPESTIVO)



¡Por fin dan ganas de mirar fulbo otra vez!


Se juega como se vive
dicen por ahí:
Angelito qué lindo
debe ser vivir así
cuando estética y ética
se llevan tan bien.
Se llama “campo de juego”
vos lo entendiste muy bien.

Entre tanta mezquindad
vos como un niño jugás.
No usa tiza, usa pincel:
¡Imaginación al poder!

Angelito...

Sale Cappa y la espada
que la usen los demás
Ángel va desarmado,
sólo quiere jugar.
A soltar las palomas,
a bailar al jardín.
Esta historia es el medio,
es que el medio es el fin.

Entre tanta mezquindad
vos como un niño jugás.
No usa tiza, usa pincel:
¡Imaginación al poder!

Angelito…

lunes, 1 de junio de 2009

PEYORATO Y LA PATAFÍSICA



....Nuestra producción dio con un documento asombroso, que viene a dar pruebas de un hecho hasta hoy puesto en duda; la participación activa del Lic. Alcides Remigio Peyorato en la rama activa del E.A.E.A.P.P.I. (Ejército Armado Ecuménico Aliviado de Patafísicos Pacifistas Irreverentes) En los videos en cuestión, se puede ver a un casi irreconocible Peyorato, suplantando inescrupulosamente a un eminente analista político de Varsovia, con el sólo motivo de generar desconcierto en el pueblo polaco, dentro de un siniestro plan de espionaje que buscaba desestabilizar todo Europa Oriental y el resto del mundo cristiano, libre y cuerdo.
....Cuidado: LA CONSPIRACIÓN CONTINÚA!


SIN PERRO QUE NOS LADRE...

"Ladran, Sancho..."
(Frase nunca escrita 
por Cervantes) 
.
¿A qué vienen esas caras largas? Si a nadie le importa, nadie se lo pierde... 
.
¿Que es triste andar así, vagando sólo, sin un perro que nos ladre? ¡Qué se le va a hacer! ¡Así anduvo el Quijote! ¡Y así anduvo, también, Sancho! 
.
¿Que no es consuelo el mal de muchos, ni lo es la gloria postrera? ¿Existe algo que sea, realmente, un consuelo? Todo paso deja huella y toda huella se borra con más o menos tiempo... 
.
¡A llorar a otra parte! ¡Qué acá no hay dónde, ni hay tiempo! 
.

OTRA VUELTA DE TUERCA (JOHN CARPENTER'S VAMPIRE)

En los últimos tiempos, innumerables series y películas de vampiros y zombis llevaron a la parodia un género fundante del séptimo arte. El ...